Estudio realizado entre marzo del 2021 y marzo de 2022 desarrollado por la Universidad de Deusto y financiado por el Departamento de Empleo, Inclusión Social e Igualdad de la Diputación de Bizkaia.
Este estudio da visibilidad al impacto del COVID-19 sobre las mujeres migradas, las cuales ya antes de la pandemia presentaban una vulnerabilidad estructural. Estas mujeres son las trabajadoras mayoritarias del ámbito doméstico y de los cuidados, caracterizado por una alta precariedad, inestabilidad, y falta de protección social. Todo esto unido a la situación administrativa irregular.
A través de un cuestionario realizado a 107 mujeres y de entrevistas en profundidad a 11 mujeres se abordó la consecución de 4 objetivos: